domingo, 29 de noviembre de 2009

¿Cómo nos ponemos de acuerdo?

Tradicionalmente los médicos hemos sido muy nihilistas en cuanto a las posibilidades de ponernos de acuerdo, debido a la hererogenicidad de nuestros intereses.

Un ejemplo de sorprendente organización y efectividad de esta, ha sido la modificación de la consideración fiscal y laboral de los médicos que trabajaban en las clínicas privadas, fruto de esfuerzo conjunto de la Federación Nacional de Clínicas Privadas y la Asociación Nacional de Clínicas sin internamiento.

Algo similar debería ocurrir con la negociación del importe de los procedimiento realizados por los médicos para las aseguradoras. Actualmente las vocalías de seguro colectivo y ejercicio libre de los Colegios de Médicos a nivel provincial, autonómico y nacional, estan promoviendo la creación de Asociaciones de Médicos Empresarios para negociar con las aseguradoras.

Algunos de los pasos enumerados a continuación se estan dando, pero de forma no lo suficientemente visible. En nuestra opinión se debe realizar lo siguiente:

1. Identificar claramenente las Asociaciones de Médicos Empresarios a nivel provincial, luego a nivel autonómico y nacional como Federaciones de las asociaciones de nivel inferior. Si se hace una busqueda en Google, se podrá comprobar la dificultad de identificar y contactar dichas asociaciones y federaciones.

2. Estas Asociaciones deben censar los profesionales que se dedican a la actividad médica privada, para poder comunicar con ellos, testear su opinión, y contar con su apoyo en las eventuales negociaciones.

3. Se deben testear de forma inequívoca los intereses de los profesionales que desempeñan esta actividad médica. Como se ha comentado en entradas anteriores de este blog, las grandes diferencias en como se desarrolla la actividad médica, hace que los intereses puedan ser distintos.

4. Se deben realizar Encuestas de Satisfacción de los médicos con la compañías aseguradoras. Si se busca en las vocalias de los Colegios pocos las han realizado. Son de particular valor las del Colegio Balear y la actual del COMM.

5. Se deben especificar y registrar claramente el importe de los procedimientos más comunes de cada una de las Especialidades Médicas para las distintas compañías, y lo que es más importante, como se ha modificado los últimos 10 años.

6. Se deben establecer los canales de negociación con los distintos Agentes Económicos de la Actividad Médica Privada, identificando a los responsables de las Aseguradoras y de sus asociaciones nacionales. No necesariamente han considerarse enemigos. Los Centros Hospitalarios Privados sufren igual que los médicos los raquiticos baremos por la hospitalización o uso de los quirófanos, con los que se puede intentar negociación conjunta. Incluso con las aseguradoras se puede hacer frente comun, para hacer que se inyecte más dinero en el mercado de las pólizas de seguro, promoviendo acciones como la desgravación de las pólizas suscritas por los particulares.

Esta podía ser una hoja de ruta en la cual nos podiamos manejar.

jueves, 26 de noviembre de 2009

¿Problemas para todos?

Todos los agentes que intervienen en la práctica médica privada parecen tener problemas económicos. A pesar de que, incluso con una cobertura sanitaria pública gratuita, el 22% de los españoles tienen además una póliza de seguro de salud privado, según publica la encuesta de seguro anual de UNESPA recientemente publicada.

En primer lugar los médicos nos encontramos con un vergonzante enquistamiento del importe de nuestros actos médicos desde años, que implica una pérdida de poder adquisitivo evidente.

Las aseguradoras pelean con la administración en la negociación de la aportación del Estado en las pólizas de los funcionarios. Disminuyen el número de pólizas nuevas y tienen que negociarlas a la baja. Algunas para capitalizarse deben de vender parte de sus activos, como Mapfre CajaSalud o algunas trasfieren parte de su propiedad como Adeslas, a entidades financieras como la La Caixa, cuyo interes por lo seguros de salud parece evidente. Sobre algunas planea las dudas de falta a la competencia, por el sospechoso parecido del importe de las pólizas o de los honorarios que pagan a los facultativos.

Los grupos hospitalarios necesitan capitalizarse, algunos como USP trasfieren parte de su propiedad a sus acreedores como Barclays o el Bank of Scottland. Otros como Quirón venden alguno de sus hospitales al entidades financieras como el Banco de Sabadell, como mecanismo de obtener liquidez.

En fin, aunque la sanidad privada es un nicho de actividad económica que resiste los embites de la crisis, parece que algo de dinero falta en el sector.

Hay quien dice que hay que inyectar dinero en la actividad, y una de las maneras, además de aumentar el mercado ya sea a traves del turismo sanitario o de la mayor concertación con procedimientos que la medicina pública no pude realizar con la suficiente rapidez, es aumentar el precio de las pólizas.
El precio de las pólizas de seguro de salud es particularmente bajo en España, lo que las hace especialmente competitivas en un ambiente en el que todos estamos asegurados en la medicina pública. Por poco dinero uno puede tener doble aseguramiento en salud. Pero probablemente este bajo importe no sea suficiente para mantener el negocio a largo plazo. Especialmente si a los médicos les pagan como se tendría que pagar.
Una solución para soportar este aumento de las pólizas es que su importe pudiese desgravarse en la Declaración de la Renta. Como ya se ha hecho en tiempos anteriores. Este hecho reconocería la importancia de este sector como generador de actividad económica que da empleo y crea riqueza. Además reconocería su importancia al permitir mayor sostenibilidad del sistema público al descargar a este de un gran carga que tendría que asumir si no existiese este aseguramiento privado.

lunes, 16 de noviembre de 2009

¿Es un buen momento para negociar con la Aseguradoras?

Nunca es buen momento. Siempre se van a encontrar argumentos para posponer los aumentos que se consideran mínimamente razonables.

Los últimos 10 años han sido de continua mejora para las aseguradoras que proveen de pacientes para la medicina privada. Veremos que pasa los próximos años. Pueden ser victimas de su propio éxito.

La percepción de la medicina privada, según el Barómetro Sanitario, ha sido de progresiva mejoría, aumentando hasta en un 20% los pacientes que han decidido ser tratados en la medicina privada, en los distintos escalones, tanto primario como hospitalario.

Desgraciadamente aunque la medicina pública se erige en garante de la universalidad, accesibilidad y equidad de la atención sanitaria, no siempre puede proporcionar una asistencia sanitaria de calidad a sus pacientes. Esto es, resolver el problema al paciente rápidamente, de forma adecuada y con recursos ajustados.

Muchos pacientes se desplazan a la asistencia privada por una mayor libertad de elección, por una mayor accesibilidad, por un trato más personalizado e individualizado, con mayor comodidad y con una cultura enfocada realmente a que el paciente se sienta satisfecho para que vuelva.

Esto ha llevado, en un ambiente de disponibilidad de recursos, a que se hayan contratado cada vez más polizas, lo que ha llevado a su vez a que se han dado servicios cada vez más sofisticados, soportando ingresos y tratamientos más prolongados y de mayor coste. El paciente progresivamente se ha acostumbrado a que puede contar con la medicina pública como una opción razonable.

...Y ¿qué pasa ahora en este ambiente de crisis?. Dejan de subir el número de pólizas, el intento de subir su precio, es recibido por los asegurados con amenazas de cambios de compañías, y todo ello en un ambiente en que se va generalizando la opción de la medicina privada como una opción integral, con todos su costes, y en cuando además se ha invertido en hospitales e infraestructuras.

Ahora los médicos queremos exigir que se cumpla lo que durante años se ha pospuesto. Seguro que ahora nos argumentan que no es el momento adecuado. ¿Lo será alguna vez?.

¿Qué nos falta en nuestra actividad privada?

Desde el punto de vista económico a los médicos empresarios nos interesa aumentar el rendimiento de nuestra actividad. Para ello nos interesa aumentar los ingresos y disminuir los costes. Para aumentar los ingresos debemos aprender como aumentar la visibilidad en el mercado de nuestra actividad, además de gestionar unos baremos adecuados a los actos médicos que practicamos. Para disminuir los costes debemos conocer las posibilidades de contratación, o como acceder a precios de compras favorables, o como usar la tecnología para aumentar nuestra productividad.

Nos interesa hacer nuestra actividad más segura desde el punto de vista legal. Para ello hay que buscar mejores condidiones de nuestros Seguros de Responsabilidad Civil, debemos asegurarnos de estar protegidos por Consentimientos Informados adecuados a cada uno de nuestros procedimientos, debemos conocer y respetar la normativa de Protección de Datos.

Nos interesa conocer como mejorar nuestra fiscalidad, por lo que debemos conocer las opciones al RETA, como es la opción de Mutual Médica, o las implicaciones de tener una sociedad limitada a partir de ahora bajo la forma de sociedades limitadas profesionales.

Nos interesa acceder a mecanismos de protección laboral en caso de incapacidad de realizar nuestra práctica médica o cuando nos jubilemos.

Nos interesa realizar una actividad médica, que dentro del medio privado, sea correcta desde el punto de vista científico, nos interesa relacionarnos con otros médicos para intercambiar puntos de vista. Nos interesa asimismo cumplir con cursos, congresos y otros medios de para mantener una adecuada formación. Nos interesa recibir, también en el ambiente privado, el patrocinio habitual que las compañías farmaceúticas proporcionan el la práctica pública para estas actividades formativas.

Cada una de estos aspectos puede ser más fácil si nos asociamos. Además habrá otros muchos aspectos que a otros de nosotros se nos ocurrirán.