martes, 4 de diciembre de 2012

Comisiones sobre la actividad médica

En un tiempo de incertidumbre económica y dificultades para todas las partes que intervienen en la actividad sanitaria privada, se está haciendo mas evidente algo de lo que se habla poco en la práctica médica: las comisiones que pagamos lo médicos porque nos envíen pacientes para tratar.

La Asociación de Médicos Empresarios está recibiendo consultas al respecto, sobre las cuales no tiene una respuesta. Con la nota actual se intenta explicar la situación que se está produciendo. Probablemente los Gabinetes Jurídicos de los Colegios Profesionales sean los que tengan la opinión más fundamentada.

Tan molesto es el asunto de estos pagos, que todos los que la reciben evitan el termino comisiones. Se habla de gastos comerciales, contrapartidas por traer al paciente, gastos atribuidos al marketing. Pero básicamente es recibir parte de los honorarios que recibe el médico por tratar al paciente.

La verdad es que este es un asunto desagradable, del que se habla poco públicamente y menos en los medios de comunicación, y del que la empresas de seguros médicos no tienen noticia o no quieren saber.

Las protestas de los médicos que se dedican a la actividad privada, sobre este respecto, han aumentado los últimos meses. Estas son siempre protestas silenciosas y que se hacen entre profesionales, pero sobre las cuales hasta ahora se puede hacer poco.

Los profesionales, se sienten muchas veces poco protegidos por asociaciones o colegios profesionales que defiendan sus intereses, ya que realmente están indefensos ante las organizaciones a las que tienen que pagar estas comisiones. Frente a las cuales muchas veces no existe más opción que la de "lo tomas o lo dejas", ya que aparentemente siempre hay otro profesional dispuesto a hacer lo que uno deja de hacer.

Las comisiones son recibidas con distinto nivel de justificación, según como sea el pacto entre los profesionales y las organizaciones que proporcionan a los pacientes. Son también recibidas con mayor nivel de aceptación según el acto médico se realice con mayor o menor proximidad a la organización que proporciona el paciente. Lo que sí es siempre recibido con desagrado es el cambio unilateral de las condiciones.

No es fácil de entender, pero la actividad funciona como sigue.

Un médico puede instalarse completamente por su cuenta y recibir pacientes de las compañias de seguros médicos o de pacientes que deciden acudir por su propia elección, o pacientes que son enviados por otros profesionales. La única comisión que en ocasiones se ejerce en este caso, es la que que quiere recibir el que envía al paciente. Es poco frecuente, pero suele ser negociada entre los profesionales. Suele ser más evidente si se trata de pacientes privados sobre los que se tiene que realizar cualquier tipo de procedimiento invasivo o quirúrgico. A veces esta comisión es más un "pacto entre caballeros" con el compromiso de reenviar pacientes recíprocamente o de devolver al paciente una vez tratado, al profesional que lo envía, mas que una remuneración económica.

Una variante de este tipo de comisión es la que ofrecen los hospitales o centros de diagnósticos a los profesionales para que se les envíen pacientes. La presión comercial es cada vez mayor, ya que la competencia de los centros es cada vez más feroz, a la vez que los márgenes de la actividad médica cada vez menor. Esta es una variante que puede ser muy complicada, cuando la comisión se ofrece a las policlínicas donde trabajan distintos profesionales, como se explica más adelante.

La otra variante de la actividad es trabajar en Policlínicas. Son centros donde se reciben pacientes para consultas ambulatorias y procesos diagnósticos o terapéuticos menores, que no implican hospitalización. Los médicos pactan que un porcentaje de los honorarios de su actividad se los queda la clínica, como pago de los gastos de consulta, recepción, teléfono, marketing. Esta variante es completamente razonable, y de ella los profesionales no se quejan, o se quejan poco, cuanto más de la falta de negociación o de la variación unilateral de las condiciones. De este tipo de relación, sí existen dos situaciones que generan protestas. La primera es que los centros de mayor nivel diagnóstico o de tratamiento, como hospitales, ofrecen comisiones a las policlínicas para que se les envíen los pacientes desde estas, cuando lo necesitan. De esta manera puede obligarse a los profesionales a tener que enviar a los pacientes a centros de los cuales están alejados o donde no están acostumbrados a acudir, eso a cambio que las policlínicas reciban la comisión desde estos centros. La segunda, que afecta más directamente a los profesionales, es que las policlínicas quieren recibir un porcentaje de los honorarios de procedimientos que realizan los profesionales en otros centros, sobre los pacientes que las policlínicas proporcionan. Para explicarlo claro pondré un ejemplo. Un otorrino ve en la consulta de la policlínica un paciente con disfonía, que resulta ser un cáncer de laringe. La policlínica cobra el porcentaje de su consulta, que suele ser un 30%, además de las pruebas complementarias que se realice. Pero además quiere cobrar un porcentaje de los honorarios de la laringuectomía que tiene que realizar el médico en otro centro hospitalario, donde tiene que desplazarse para la intervención y para el seguimiento.

La tercera variante es los profesionales que trabajan completamente para un centro hospitalario  dotado para intervenciones, consultas, y pruebas complementarias. Los profesionales pactan dejar al hospital un porcentaje de sus honorarios, el cual también cobra todos los derechos de hospitalización y todos los procedimientos diagnósticos y terapéuticos. Eso a cambio de que el hospital proporcione los pacientes de su especialidad para ser tratados. Los problemas actuales están surgiendo con las dificultades globales de todas las organizaciones, con gastos financieros en aumento, con baremos de las compañias de seguros en disminución, con lo que los márgenes de las empresas hospitalarias están disminuyendo. Todo eso junto al movimiento que las fusiones de grupos hospitalarios generan, está haciendo que de forma unilateral los hospitales quieran aumentar el porcentaje de los honorarios de los médicos que se quedan.

El tema de las comisiones sobre los honorarios es especialmente doloroso, cuando se comprueba como de paupérrimos son dichos baremos y como de faltos de actualización desde hace años. Se hace más doloroso si cabe, cuando toda la responsabilidad civil y jurídica ante reclamaciones por eventuales complicaciones, se quieren hacer recaer completamente sobre el profesional, y no parcialmente también sobre el que cobra por ello.

En otros países está formalmente prohibido y castigado por los Colegios Profesionales, el recibir remuneración por lo actos médicos que no se realicen, o en los que no se participe. No sé si es así en el nuestro.

viernes, 29 de julio de 2011

Turismo sanitario

De manera periódica el concepto de turismo sanitario se reabre como opción para dar mayor mercado tanto a la medicina privada como al turismo convencional.

Frente al concepto peyorativo que tiene el aprovechamiento de ciudadanos que deciden pasar una temporada en nuestro país para usar nuestras estructuras sanitarias públicas sin coste, existe otra actividad potencial que sirve para aumentar nicho de mercado en estos tiempos de crisis.

Se trata de ofrecer a ciudadanos extranjeros, servicios médicos integrados con la oferta turística más convencional, con alta calidad hospitalaria, médica y hostelera a precios más competitivos que en sus paises de origen.

En este sentido se puede leer una realista descripción de la naturaleza de este negocio realizada por el Director Comercial y de Marketing del Grupo Hospiten.

Además se observa en el mercado una progresivo interés en esta actividad, aunando esfuerzos privados y públicos en esta iniciativa como ya se ha hecho en Barcelona, o como empieza a hacerse en Madrid, con la inicativa Madrid Centro Médico, promovida por Manuel Lamela, anteriormente Consejero de Sanidad de la Comunidad.

jueves, 2 de junio de 2011

Al final otro compra los Hospitales de Adeslas

Al final la familia Gallardo se hace con el 80% de los hospitales de Adeslas con una oferta incontestable. Por 350 millones de euros se imponen a todos los otros posibles compradores.

Así el propietario de Laboratorios Almirall amplian su influencia en el sector sanitario. De una manera u otra ya participan en distintos negocios del sector como la biotecnológica suiza Lonza, el grupo español de residencias para la tercera edad SAR y la firma suiza especializada en odontología Zahnarztzentrum.

Probablemente esta actividad inversora en el sector sanitario exprese la creencia de que existe un recorrido largo todavia de beneficio en la actividad sanitaria privada, siendo un sector anticíclico, y con un gasto percápita todavía inferior en españa al del resto de la unión europea.

lunes, 30 de mayo de 2011

Rediseño del mapa hospitalario privado

Tras la salida de Gabriel Masfurrol de la Dirección del Grupo USP Hospitales, a la vez que entraban en la propiedad los dos principales acreedores Barclays y Bank of Scotland, no pocos pensaban que por algún lado entraría de nuevo en el negocio hospitalario privado.

Parece que ahora es el momento tras el intento de compra, acompañado al fondo americano Blackstone, de los 10 hospitales de Adeslas que son hasta ahora propiedad de Criteria, el holding empresarial de la Caixa y de Mutua Madrileña.

Aunque también existen otros interesados en la compra de dichos hopsitales como es el nuevo Capio España, filial española de la matriz sueca, comprado actualmente a Apax Partners y Nordic por CVC, dueño entre otros de la Fundación Jimenez Diez de Madrid

Para animar el mercado parece que tambien se muestran interesados Marcapital, exinversor de Quiron y Hospiten y Magnum, dueño de la clínica Teknon de Barcelona.

El paquete de los 10 hospitales en venta son Nuestra Señora de Fátima (Vigo, 196camas y 352.700 pacientes); San José (Vitoria, con 51 camas y 57.177 pacientes); Montserrat (Lleida, 37 camas y 97.398 pacientes); Nuestra Señora de América (Madrid, 100 camas y 141.818 pacientes; Santa Cruz (Tenerife, 71 camas, 73.200 pacientes); Santa Catalina (Las Palmas, 184 camas y 233.939 pacientes); Virgen del Mar (Almería, 78 camas, 156.117 pacientes); Nuestra Señora de La Salud (Granada, 71 camas, 190.763 pacientes); y Parque San Antonio (Málaga, 83 camas y 115.818 pacientes).

viernes, 20 de mayo de 2011

Donde digo digo, digo Diego

Siempre se había argumentado que una forma de aumentar el estimulo para la contratación de seguros de salud, y una posibilidad de subir el coste de las pólizas de manera más acorde con paises del entorno, era la opción de desgravar como gasto en la RENTA de las familias, el coste invertido en la sanidad privada.

Uno de los anuncios de incentivación de la actividad privada por la Consejería de Salud Catalana, en su nuevo gobierno fué la posibilidad de que esto se realizase en el ejercicio actual.

Ahora se desdice de ello, "no considerandola una de las prioridades", un representante de dicha Consejería. Probablemente los 1.300 millones de euros que las entidades de seguro privado ingresaron en Cataluña en año pasado tenga algo que ver.

Probablemene la gran actividad desarrollada por el IDIS desde su creación sea fruto de las dificultades que puede comenzar a pasar el sector de la sanidad privada, agravadas con medidas como esta. Y según lo corrobora Cristina Contel de la Asociación Catalana de Entidades de Salud (ACES).

miércoles, 6 de abril de 2011

Más detalles de como reducir gastos

Como ya hemos comentado, parecen que son los catalanes los únicos lo suficientemente valientes para reconocer la situación financiera dificilmente sostenible de la sanidad pública, y establecer medidas de choque, seguro muy poco populares. Probablemente estas medidas solo puedan ponerse en marcha al incio de una legislatura, cuando el desgaste electoral de algo muy impopular, probablemente pueda ser amortiguado con el tiempo. Se anuncian las medidas a adoptar en el Clinico de Barcelona, buque insignia de la medicina catalana, tanto por resultados médicos, como de gestión, como por popularidad, y de satisfacción del los facultativops que trabajan en esta institución. Las medidas concretadas son, cierre de urgencias, cierre de quirófanos de tarde, cierre de plantas de hospitalización, despido de 450 empleados, 35% médicos, disminución de costes en comidas, cambio de sabanas y consumo energético, y negación de la asistencia a pacientes que no pertenezcan al area sanitaria. Tremendo. Si esto hacen los catalanes, que no hará falta en otras administraciones.

lunes, 28 de marzo de 2011

Estudio del rendimiento de una consulta privada

La verdad es que sorprende muy gratamente constatar la gran actividad que el Colegio de Médicos de Madrid, con su Vocalia de Ejercicio Libre y Colectivo, realiza en defensa de los facultativos que desarrollan actividad privada. Se pueden ver en su web todas las actuaciones que promueven. En particular me llama la atención un estudio sobre el rendimiento obtenido por paciente en una consulta de medicina privada. Para ello se repasan los honorarios de 15 compañias de seguro, se estima el número de pacientes vistos por hora, se estima el porcentaje de nuevos y revisiones, se detallan los gastos de explotación en sus distintos apartados, se descuentan los impuestos, todo ello para calcular un rendimiento neto por hora de consulta de 20,20 euros y un rendimieneto neto por paciente de 4,04 euros. Sobran los comentarios.